El desarrollo
sostenible consiste en el uso de los recursos del planeta sin que lleguen a
agotarse y evitar contaminar más. Por ello, debemos utilizar fuentes de
energía renovables y que no contaminen.
Mientras sigamos usando
fuentes de energía no renovables, tenemos que usarla bien y no malgastarla,
para que las generaciones que vienen puedan disfrutarla.
Actualmente se están
produciendo demasiados residuos. Como consecuencia, la naturaleza no es capaz de
asimilarlos. Con lo cual, debemos reducir la producción de residuos y
reutilizarlos. Para ello es necesario reciclar todo lo que se pueda. No cuesta
nada ir un poco más lejos para tirar la basura en el contenedor que corresponda
en vez de tirarla a una papelera. Ya existen contenedores de pilas para
contaminar menos. Está bien que cuando estemos en el campo, guardemos toda la
basura en una bolsa para luego tirarla en un contenedor y no tirarlo todo al
suelo.
Otras formas de ahorrar
energía son: no malgastar el agua, al lavarse los dientes no dejar el grifo
abierto, no encender el lavavajillas o la lavadora si no están del todo llenos
o darse una ducha en vez de un baño, por
ejemplo; ahorrar luz, no dejar las luces encendidas si no las usamos y apagar
la televisión cuando dejemos de verla.
Para alcanzar el
desarrollo sostenible, existen centrales de energía que utilizan fuentes de energía renovables, como por ejemplo, las centrales
eólicas, que utilizan como fuente de
energía el viento; las centrales solares
térmicas, que emplean el calor del sol o las centrales solares fotovoltaicas,
que utilizan unos paneles que funcionan con la luz del sol para producir
energía.
Andrea Carrón Pereira 6º Primaria